La planta desaladora de Carboneras (Almería) fue diseñada en 1999 y comenzó su explotación en 2005. El reciente contrato adjudicado también incluye las labores de redacción del proyecto constructivo y la ejecución de las obras de mejora energética de la planta.
El proyecto cuenta con fondos Next Generation y garantiza un menor consumo de energía reactiva y un mejor ciclo de vida de los equipos, así como mayores posibilidades para aumentar la producción.
La desaladora tiene una capacidad de 120.000 m3 diarios y cuenta con un equipo de 12 líneas de producción que se sirven de turbinas Pelton, aunque la tecnología actual permite un mayor ahorro energético a través de los sistemas de cámaras isobáricas. Este sistema se incorporó en dos de las líneas en 2016.
Con la instalación de los nuevos equipos, las diez líneas de producción actuales se convertirán en cinco líneas con el doble de producción.
La desaladora de Carboneras fue la mayor planta desaladora de agua de mar construida en Europa en el momento de su construcción, y tiene, además, el objetivo de garantizar el agua para el abastecimiento de municipios y agua para el regadío de 7.000 hectáreas en el Campo de Níjar.