La depuradora y regeneradora de aguas residuales del Noreste de Tenerife, ubicada en Valle Guerra (La Laguna) es un referente en el cambio del modelo del ciclo del agua en la producción de agua regenerada, que apuesta por aumentar la disponibilidad de los recursos hídricos en un contexto de emergencia climática en muchas zonas del mundo.
La planta tiene una capacidad de diseño de depuración de 7.000 m3/día, actualmente trata unos 5.000 m3/día y trata el 100% del agua que llega. Además, tiene una capacidad de producción de 4.000 metros cúbicos diarios de agua regenerada para uso agrícola. La instalación está equipada con la última tecnología lo que permite reducir costes, olores y devolver el agua en las mejores condiciones.
El proyecto realizado por Sacyr ha ganado el Premio Agustín de Betancourt a la Mejor Obra de Ingeniería Civil (periodo 2014-2018) de las Islas Canarias. El galardón reconoce el proyecto con tecnología especializada y avanzada que ofrece agua de calidad para uso agrícola y que tiene una importante repercusión en el bienestar social y medioambiental.
El Consejo Insular de Aguas de Tenerife adjudicó la explotación de la planta por un periodo de 4 años más, tras la finalización del anterior contrato de operación y mantenimiento de la instalación.